Un par de AirPods ingeridos, todavía dentro de su estuche de carga, fueron extraídos con éxito de un cachorro, sin dañar al perro ni a los oídos.
La propietaria británica Rachel Hick, de Hull, llevó a su golden retriever Jimmy a los veterinarios después de que se tragara los auriculares inalámbricos y el estuche de carga el domingo de Pascua.
"[Jimmy] estaba saltando y corriendo volviéndose loco, estaba tan emocionado", dijo Hick al Correo diario del casco. “Cuando saltó, sacó mis AirPods de mi bolsillo y se cayeron al suelo, y antes de que me diera cuenta de que se habían caído al suelo, se los había comido enteros. Él me miró inmediatamente después y me miró como si dijera 'ese no era el placer, ¿verdad?' Mi corazón se hundió ".
El veterinario realizó una radiografía que mostró el estuche de los AirPods, aún intacto, dentro del sistema digestivo del perro. Debido a la preocupación por el ácido de la batería debido a la fuga de la carcasa, se acordó que funcionarían. La cirugía no solo fue un éxito rotundo, sino que los AirPods se quitaron sin un rasguño.
"Ciertamente es una advertencia para otros dueños de perros", dijo Hick. “No puedo creer que los AirPods sigan funcionando; ¡han tenido una buena limpieza! "
Comiendo AirPods accidentalmente
Esta no es la primera vez que los AirPods se ingieren accidentalmente (aunque, hasta donde yo sé, esta es la primera vez vez que sucedió mientras estaban en su caso de acusación). Hace un par de años, un desafortunado taiwanés, llamado Ben Hsu, se durmió usando sus AirPods. Se despertó y descubrió que uno había desaparecido y, cuando usó la aplicación "Find My" en su iPhone, escuchó un pitido proveniente del interior de su estómago.
Por lo que vale, los AirPods pueden tener un olor extrañamente atractivo. Algunas personas han informado que huelen a arándanos, probablemente debido a la presencia de compuestos químicos utilizados como parte del proceso de fabricación. Aún así, el hecho de que tus AirPods huelan bien no significa que debas sentirte tentado a engullirlos. Y ese es un mensaje que también vale la pena compartir con su perro.
Vía: Veterinarios-Ahora